Viaje de ensueño a los mandos de un Subaru 4

Subaru viajero
En esta serie de post recorreremos el mundo para mostrarte qué modelo de Subaru es perfecto para cada lugar elegido. El de hoy es París: una de las ciudades más bellas del mundo, la más visitada y, probablemente, la más romántica de las que pueblan el planeta

Impreza

Para la ciudad del amor no cabe duda de que el vehículo apropiado es el elegante Subaru Impreza D. Por primera vez en toda su ya ilustre historia, este vehículo incorpora ahora un motor diésel horizontalmente opuesto, por lo que consigue una conducción equilibrada y una excelente tracción, al combinarse con el sistema Symmetrical AWD.

Torre Eiffel

Por ello, nos permitirá disfrutar de la capital francesa en todo su esplendor: su sobrenombre de “Ciudad de la Luz” se debe a que París fue la primera ciudad en dotar a sus calles y edificios importantes de luz eléctrica, lo que causó admiración en todo el mundo, aunque este nombre también podría deberse perfectamente a que Francia, y en concreto París, ha sido también la luz del mundo y ciudad adelantada a su tiempo. Como muestra el hecho de que aquí se fraguaron los Derechos del hombre y los principios de libertad, igualdad y fraternidad.

Por ello hemos elegido este Impreza Diésel, que ofrece una sobresaliente eficacia energética y unas prestaciones deportivas, a la vez que conserva todo su estilo y sofisticación.

Notre Dame

París hace honor a su fama y no defrauda a nadie que acude a visitarla. Es una ciudad mágica, con un encanto especial que se percibe en cada esquina, cada plaza, o simplemente en cada uno de sus cafés. Y el Impreza D nos la descubre de lleno gracias a su transmisión manual de 6 velocidades, AWD; a sus dimensiones: 4.415 x 1.740 x 1.470 mm.; a un motor horizontalmente opuesto de 4 cilindros y doble árbol de levas en cabeza, turboalimentado, con 16 válvulas y diésel.

A diferencia de otras grandes ciudades europeas, París no tiene un centro definido alrededor del cual se expande la ciudad. Más bien, todo París es centro. Por ello, el Impreza D, con su cilindrada de 1.998 cc. y su potencia máxima de 110 kW (150 CV) y 3.600 rpm. podremos recorrer la ciudad de arriba abajo sin problemas.

Atardecer en París

Un paseo por París en el Impreza D es un paseo por un lugar donde el tiempo no parece existir, donde pese al bullicio y al movimiento propio de una de las ciudades más importantes del mundo el visitante tendrá la sensación de encontrarse en un lugar que no ha cambiado durante décadas, o incluso siglos.

Por supuesto, queremos seguir contando con vuestra opinión para que nos propongáis más viajes a través del mundo bajo los mandos de un Subaru.

Etiquetas