Medir los tiempos de reacción en el tráfico real para mejorar en seguridad


Hay un proyecto interesantísimo que se está desarrollando con tecnología española (y no paramos de ver últimamente proyectos con tecnología autóctona). Se trata de un estudio de los tiempos de reacción de los conductores en situaciones de tráfico real. Es decir, para mejorar las mediciones se deja de lado la simulación en laboratorio para «cosechar» datos de reacciones reales. Esto no es tan sencillo como parece.

En el simulador o en el laboratorio tenemos la ventaja de poder establecer las condiciones del experimento que queremos, y cuando queremos. Pero la desventaja del laboratorio es que las mediciones no se corresponden exactamente con la realidad, precisamente por el ambiente y el contexto artificial de la prueba. Por eso es tan valioso poder medir reacciones con coches reales, en medio del tráfico real.

¿Por qué es esto tan importante? Los datos obtenidos de mediciones en situaciones reales pueden revelar que estemos pasando por algo detalles que, por parecer carentes de importancia, sean realmente decisivos para entender las reacciones de las personas ante situaciones de peligro (o situaciones que no sean peligrosas, pero sí que requieran buena reacción). Se introduce:

un método innovador de diagnosis de accidentes, consistente en instalar una serie de sensores en un vehículo de pruebas para analizar las reacciones del conductor durante una maniobra de frenado en condiciones de tráfico real. Una cámara graba los movimientos de los músculos faciales del conductor. Las imágenes captadas por la cámara se comparan después con una serie de datos de medición, como velocidad, posición del volante, posición del acelerador, fuerza ejercida sobre el pedal de freno, secuencia del ABS, distancia recorrida, retardo, etc.).

La cantidad de datos recabados es impresionante, pero lo mejor es la confrontación de datos puros (procedentes de los sensores) con las imágenes captadas con las cámaras. Relacionan directamente las expresiones faciales con los tiempos de reacción y actuación. La parte técnica también es interesante, y la podéis consultar directamente en la página de HBM, la empresa española que ha montado todo el sistema de medida.

Con este tipo de estudios y metodologías se puede avanzar mucho en varios frentes, primero el de comprender cómo reaccionan las personas ante situaciones de peligro real, y segundo, cómo pueden refinarse los sistemas de seguridad para ayudar a los conductores a reaccionar antes, mejor, y con más resolución.

Más información | HBM

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